Los museos alemanes se vuelven cada vez más participativos Agosto 2025 Archivo - Archive Noticias - News 29 de agosto de 2025 Por Cordula Dieckmann y Sabrina Szameitat (dpa) Múnich/Berlín, 27 ago (dpa) – La Pinacoteca de Arte Moderno de Múnich se sumó con su colorida instalación Flux a la tendencia que recorre el mundo y que propone que los museos ya no sean espacios donde no se puede tocar nada, sino ámbitos de participación. En Flux, un colorido patio abierto al público, al aire libre, se puede comer y beber, celebrar, participar en eventos o dar rienda suelta a la creatividad. La idea es disolver las fronteras entre el arte y la vida cotidiana y abrirse a todo el mundo. Se espera que el espacio cuente con una oferta cultural gratuita durante todo el año. Flux se nutre del vecindario y de todos aquellos que quieran darle forma al lugar juntos, afirma la gestora cultural Sarah Karuga. Añade que los fines de semana, cuando hace buen tiempo, acuden más de 1.600 personas al día. Algunos también organizan sus propias noches de juegos allí y utilizan Flux como lugar de encuentro. El arte participativo dejó de ser una excepción. Así lo cree la directora general de la Asociación Alemana de Museos, Sylvia Willkomm. Ella ve en esta evolución «claramente una ampliación contemporánea de la misión educativa cultural». Por lo tanto, el enfoque de muchos museos ha cambiado. «La interacción y la idea de ‘vivir’ los museos ya no son solo un ‘extra’, sino una parte integral de la oferta. Los museos dejaron atrás la visita lineal, en la que solo se pueden ver las exposiciones», explica Willkomm. Esto también se puso de manifiesto recientemente con una iniciativa del Lenbachhaus de Múnich que permitió a los visitantes coser, martillar, serrar, organizar carreras, columpiarse, trepar, bailar o jugar allí hasta principios de agosto. Sobre todo las familias con niños se lo pasaron en grande. Y se logró algo con lo que otros museos solo pueden soñar: «Vinieron por su propia iniciativa jóvenes de entre 13 y 18 años, un grupo al que normalmente nos cuesta llegar con nuestras ofertas», afirma el director del museo, Matthias Mühling. Muchos de ellos entraron en contacto con el museo por primera vez. Las reacciones del público fueron muy variadas, «desde el entusiasmo hasta la irritación, pasando por la curiosidad», según el director. En Berlín también hay actualmente algunas exposiciones en las que se pide la participación del público. La Nueva Galería Nacional, por ejemplo, muestra actualmente obras de la excepcional artista Yoko Ono (92) y de la brasileña Lygia Clark. En «Yoko Ono: Dream Together», los visitantes pueden jugar una partida en tableros de ajedrez completamente blancos con piezas también blancas. En otra mesa hay fragmentos de tazas rotas que se pueden pegar para crear nuevos objetos. La exposición especial finalizará el 14 de septiembre con la performance «Bells for Peace». Los visitantes pueden traer sus propias campanas y tocarlas por todo el recinto en favor de la paz. En la retrospectiva de la artista brasileña Lygia Clark (1920-1988), los mismos visitantes se convierten en arte. Clark es conocida por una experiencia artística sensual y relacionada con el cuerpo. En la exposición se pueden doblar esculturas móviles en nuevas direcciones o probar gafas, trajes de cuerpo entero y máscaras. En una época en la que lo visual está tan omnipresente, sobre todo a través de Internet y las redes sociales, muchos expresaron su «gran deseo de una experiencia museística sensual y una interacción directa con el arte y los objetos», según informa la Nueva Galería Nacional al ser preguntada por dpa. La Galería Nacional de Arte Contemporáneo de Berlín también invita durante los meses de verano a una serie de shows musicales gratuitos, «Berlin Beats», en los que DJs pasan música en el jardín del museo. Las cifras aumentaron considerablemente para la tercera edición de este evento. El museo observa «muy claramente» que la serie con los DJs impacta en el número de visitantes, especialmente en las horas previas al comienzo de los eventos. La portavoz informa de que son especialmente los jóvenes los que visitan el museo.