Autoevaluación: ¿Estás siendo un profesional de seguridad humilde? por Ari Yacianci Archivo - Archive Ciencias y Comunicación - Science and Communication Febrero 2024 17 de febrero de 202417 de febrero de 2024 Ari Yacianci – SRMP – Profesional en Gestión de Riesgos y Seguridad Ciudad de Buenos Aires – Argentina www.ariyacianci.com A veces asociamos “ser humilde” con no poseer bienes caros, con hacer trabajo manual, o incluso con el concepto de modestia, que consiste en restar importancia a nuestros propios logros y aportes. Pero el verdadero concepto de humildad se basa en reconocer tanto nuestras propias fortalezas como nuestras propias debilidades, y luego actuar en consecuencia ante este conocimiento. Es decir: debemos practicar simultáneamente la autoconciencia y la autoconfianza. ¿Crees que estás siendo un profesional de seguridad humilde? ¡Te desafío a completar esta evaluación y descubrirlo! Autoevaluación ¿Cómo te sientes acerca de tus conocimientos sobre gestión de seguridad? Ya sé todo lo que hay y que habrá que saber sobre este trabajo. No lo sé todo, así que estoy completamente abierto a aprender y reaprender. Creo que no sé nada sobre mi trabajo, y me siento como un impostor. ¿Cómo te sientes al pedir consejo o ayuda a otras personas? Puedo hacerlo todo yo solo; ¡otras personas lo arruinarían todo de todos modos! No puedo hacerlo todo solo, así que necesito que otras personas trabajen y colaboren conmigo. Realmente no puedo hacer nada solo, ¡no soy nada sin mi equipo! ¿Cómo te sientes al agradecer y felicitar a otras personas? Animar a las personas por lo que hacen no tiene sentido: ¡es su trabajo! Animar a mis colaboradores y colegas es beneficioso para todos los involucrados. ¿Quién soy yo para animar a alguien? Apenas puedo motivarme a mí mismo. ¿Cómo te sientes al recibir retroalimentación sobre tu desempeño? No necesito la opinión de nadie más: ¡lo que yo pienso es lo único que importa! Comparar mis propios puntos de vista sobre mí mismo con los comentarios de otras personas es muy valioso. Al final, cómo me ve la gente lo es todo… siempre necesitaré su validación. ¿Eres realista a la hora de fijar objetivos y presentar propuestas? ¡Sí, puedo hacer cualquier cosa y lograr todo lo que me proponga! Nada puede detenerme. Sí, soy una persona muy capaz, pero mi tiempo y mis recursos siempre serán finitos. No, suelo apuntar demasiado bajo y sentirme insatisfecho, o suelo apuntar demasiado alto y no lograr mis objetivos. ¿Estás interesado en aprender otras formas de pensar y trabajar? No, ¿para qué? La gente que no piensa como yo es el problema. Sí, me gusta investigar diferentes puntos de vista y metodologías para mejorar los míos. Nunca tengo claro cuál es la mejor forma de trabajar, lo que me vuelve indeciso. ¡Comprobemos los resultados! Si has contestado «1» a la mayoría de las preguntas, parecería que no estás siendo muy humilde. Aconsejaría que te tomes un tiempo y reconsideres tu forma de pensar y actuar, para no ceder ante la arrogancia y el orgullo. La humildad es un hábito y no un rasgo inmutable: ¡nunca es demasiado tarde para aplicarla! Si la mayoría de tus respuestas fueron «2», estás siendo un profesional de seguridad humilde. Eres consciente de tus propias fortalezas y debilidades, y actúas en consecuencia con tus limitaciones. ¡Enhorabuena, y sigue así! No siempre será fácil, pero siempre terminará valiendo la pena. Si respondiste mayoritariamente «3», es posible que estés siendo demasiado pasivo. Debes darte cuenta de que ser humilde requiere tanto autoconciencia como autoconfianza, mientras que sólo ser consciente de tus rasgos negativos y estar lleno de dudas te vuelve demasiado modesto y, en última instancia, socava tu propia confianza a la hora de posicionarte como profesional. ¡Debes pensar detenidamente en tus contribuciones pasadas y presentes, y darte cuenta de lo valioso que en realidad eres! Conclusión Cualesquiera que sean tus resultados, espero que esta pequeña evaluación haya sido esclarecedora. Y recuerda: la arrogancia y el egoísmo a veces pueden ser útiles a corto plazo, pero la clave para lograr el éxito a largo plazo y mantener relaciones valiosas es mantenerse humilde.